Por: Saúl Montoro
¡FELIZ CUMPLEAÑOS!
Hoy cumplirían años estos dos pilares del cine mexicano.

Don Andrés nace en Saltillo, Coahuila el año de 1898 mientras que Pedro nace en Mazatlán, Sinaloa el año de 1917.
Simplemente no se podría explicar el fenómeno de la «Época de oro» y el cine mexicano en general sin mencionar a estas grandes luminarias que dejaron una huella imborrable en México.
Y cierro esta conmemoración epistolar con un diálogo entre Silvano (Pedro) y su tio Laureano (Don Andrés) tomado de la extraordinaria película La Oveja Negra (1949) de Ismael Rodríguez:
«Ya que el pueblo me ha eleuto para prefeuto, es porque yo soy auto para el efeuto, y como en mi humilde conceuto yo he sido un hombre reuto… Aceuto.»