Por: Saúl Montoro
UN DÍA COMO HOY pero de 1966 se estrena la película TIEMPO DE MORIR, Opera Prima del señor Arturo Ripstein.

Lo que en un principio parecía un capricho del nene Ripstein teniendo como padre a Don Alfredo – importantísimo productor de cine mexicano – resultó ser una muy bien realizada película de drama del tipo western donde (¡Por supuesto!) la venganza es el hilo conductor de toda la trama. Cuenta con el argumento y guión de García Márquez (quien hacía sus pininos en el cine) y un ya consolidado Carlos Fuentes quienes dieron al joven Arturo todas las herramientas para que bordara una historia digna y alejada del convencionalismo del género incluso en de los EEUU o Italia. Entrando en las grandes ligas de cineastas consolidados que lograron hacer grandes películas de Western como Don Ismael Rodríguez) con LOS HERMANOS DEL HIERRO (1961) o EL TUNCO MACLOVIO (1971) de Alberto Mariscal por mencionar solo dos.
Este sería el comienzo de una carrera con más altas que bajas (bajas casi todas a partir de que su mujer escribiera los guiones de sus películas) de un cineasta indispensable para entender el cine mexicano a partir de los años sesenta y que mantuvo en alto la manufactura de la cinematografía nacional con obras fílmicas que han trascendido fronteras para enfrentarse a naciones consideradas monstruos del cine mundial.
Película indispensable para el cinéfilo mexicano como parte de su cultura.