Por: Redacción
La banda originaria de Ciudad Satélite, San Pascualito Rey, nos sorprende con una nueva versión del clásico Necesito una compañera de Los Bukis. Esta reinterpretación, lejos de ser un simple cover, refleja la esencia del grupo, quienes han sabido fusionar el rock con un ritmo que ellos mismos denominan dark guapachoso. Esta mezcla inusual combina elementos oscuros y cósmicos con la cadencia bailable de la música popular mexicana.

La idea de revivir este icónico tema nació durante una conversación entre Juan Morales, bajista de la banda, y un amigo involucrado en la musicalización de películas. “Ya se habían propuesto otras canciones, pero cuando recordamos esta, todos coincidimos en que era la indicada”, comparte Morales. Así, la canción se sumó al repertorio del sexto álbum de estudio de la banda, titulado Dark Guapachoso, que incluye nueve canciones que consolidan el distintivo estilo de la banda.
Vicente Jáuregui, guitarrista del grupo, explica el origen del término “dark guapachoso”: “Nos dimos cuenta de que nuestro sonido tenía algo de grupero y cósmico, oscuro pero bailable, y decidimos llamarlo así”. Esta fusión de contrastes ha sido un sello de la banda, que siempre ha buscado romper los esquemas tradicionales y explorar nuevas fronteras musicales.
El videoclip de Necesito una compañera, el tercero de este álbum, cuenta con la participación del legendario músico Jaime López, y sigue a los lanzamientos previos de Dónde quedó el amor y Esa palabra, ambos dirigidos por Aldo Hernández y Natalia Gómez. Además, la banda ha contado con colaboraciones de músicos destacados como Alonso Arreola y Juan Pablo Villa.
Con influencias de la música de los años 70 y letras que exploran el amor, el desamor y los ciclos de la vida, Dark Guapachoso demuestra la versatilidad de San Pascualito Rey. Este nuevo material ya está disponible en plataformas digitales y será parte central de la gira que la banda prepara para 2025, con la que celebrarán 25 años de trayectoria. Según Juan Morales, el tour comenzará con un concierto en el Lunario del Auditorio Nacional, donde prometen llevar su “dark guapachoso” al máximo.