Por: José M. Viniegra
Desde este 3 de febrero, a las 10:00 p.m. podremos presenciar el primer capítulo de la investigación que corre a manos de History Channel: Persiguiendo a Hitler. A mano de 20 personas de la investigación y el periodismo se da el proceso de elucidación de unas asombrosas e importantes pistas que datan de la caída del Tercer Reich que muestran que posiblemente éste no murió, sino que escapó a las tierras de Argentina.
Para realizar la investigación, los miembros del grupo se hicieron de más de 400 páginas de documentos desclasificados por el FBI que sostienen la teoría de que Hitler no estaba en el sitio donde se le buscó, en el Bunker donde supuestamente se suicidó con su esposa y sus hijos.
Dentro de la misma investigación, se lleva a cabo un proceso que esclarece, entre otras cosas, el número de ocasiones en que aparecen
nombrados los países del mundo; no todos, obviamente, pero sí varios, y entre estos aparece mencionado, más que ningún otro, Argentina; para ser más precisos, luego de ahondar en el aval de la información, y con la pista adicional de un joven que había denunciado el sitio en que encontrara tanques marcados con la famosa cruz gamada nazi (recordemos que en la India existe otra de sentido inverso), detectan que el más tiempo que pudo haber estado oculto habría sido en Charata, en una mina artificial o “sótano”. Para fines prácticos, otro bunker.
El problema era la extensión de Argentina, así que tuvo que hacerse un mapa topográfico con ayuda de drones para encontrar los lugares más probables donde pudo encontrarse Hitler y sus oficiales.
En aquel momento en que el joven de 16 años levantó la notificación a las autoridades charatas, el gobierno de argentina estaba al mando en su etapa militarizada que no dejaba paz ni a extraños ni a conocidos, ni a extranjeros ni a natales.
Desde mi perspectiva, encuentro no dudoso el que se encontraran armas y tanques en Argentina. Pero, a mi ver, las posibilidades son amplias: podrían haber estado ahí sólo sus generales, podrían haber sido seguidores con el encargo de no dejar morir el ideal nazi, podrían haber planeado una toma mundial y ello habría requerido dejar a buen tiempo, como estrategia, tanques y armas en diversos puntos del mundo, a menos que estos se encontraran en una cantidad irrisoria para una posible toma mundial. Como sea, es un capítulo, acaso, y la presentación lo que vimos. Faltará ver mucho más de esta serie para saber a qué nos enfrentamos en el ámbito mundial e histórico, y para ello: History Channel.
Aún sin amar la historia, History entrega relatos temporales con una calidad atractiva a todo el público. Está al pendiente de su salida este 3 de febrero en su canal.