Por: Eli «La Panterita» Herrera
Cuántas veces nos hemos lanzado con todo lo que somos y tenemos por un ideal, por un objetivo, por una persona, cuántas veces hemos estado de pie en el borde viendo hacia el abismo dispuestos a lanzarnos así, sin nada a lo que podamos asirnos, cuántas veces hemos sufrido la metamorfosis que nos hace reflexionar a profundidad, honestamente.
Gabriela Ochoa escribió la obra de Teatro Sin Paracaídas, ella misma la dirige con una propuesta fascinante en donde las imágenes, símbolos y metáforas son parte fundamental del montaje, esta obra es una crítica a los estereotipos masculinos y femeninos, en donde el surrealismo nos da la pauta del juego emocional.
Una mujer reptil que sobrevive en una tina de baño da el toque húmedo a la historia, la azafata subsiste con sus fantasías aéreas de sexo en las alturas, una terapeuta resiste la complejidad de verse reflejada en sus pacientes, además un hombre haciendo las preguntas adecuadas y dolorosas, todos entremezclados, involucrados, jugando a lo que la mayoría queriendo o no jugamos muchas veces, a relacionarnos sentimentalmente con otros e intentar salir ilesos.
Dos de las actrices de esta puesta en escena fueron entrevistadas para El Alebrije y nos mencionaron lo siguiente: Pilar Cerecedo (la terapeuta) dijo “los hombres y las mujeres nos relacionamos con estereotipos, la idea de la directora es intentar romper esos estereotipos, conozco el trabajo de Gabriela y comparto su planteamiento, casi siempre que terminamos una relación nos sentimos muy mal y decimos que no nos volverá a suceder, y cuando nos damos cuenta ya estamos enamoradas de nuevo” añadió al respecto “el dolor es parte de la vida, por un minuto de felicidad el amor vale la pena”.
Por su parte la actriz Romina Coccio (azafata) nos mencionó “yo conozco a Gaby desde hace muchos años, me presentó el texto y no tuve dudas en trabajar con ella, la obra tiene muchísimo humor negro, coincido con Pilar porque cuando terminamos una relación y el dolor es tanto que no queremos volver a sentirlo, pero en realidad lo que nos da más miedo es no volvernos a enamorar”.
Comparten escenario con Pilar Cerecedo y Romina Coccio, Gabriela Betancourt (mujer reptil) y Alejandro Morales (llorón/Fisher). Los cuatro realizan un trabajo emocional y corporal extraordinario, así que amigos de El Alebrije no pueden perderse esta obra que estará en temporada hasta el 19 de abril, los horarios son jueves y viernes a las 20:00 horas, sábados 19:00 horas y domingos a las 18:00 horas, se suspenderán funciones 2 y 3 de abril. El Teatro El galeón del Centro Cultural del Bosque (detrás del auditorio) aloja esta obra. Y así auto reflexionando, como todas las noches saldré al jardín y aullaré con la luna.