Por: José Viniegra.

Así es. De colapsarse el sistema de suministro de agua potable en el DF y su infraestructura, otras áreas o rubros sufrirán el mismo colapso de manera simultánea, lo que incluirá los alimentos y la economía del país y podríamos estar atorados en uno de los mayores problemas de nuestra historia.

El día de hoy, 25 de agosto, se anunció el próximo estreno en carteleras de la película documental H2Omx, dirigida por José Cohen y Lorenzo Hagerman y cuya productora es Alejandra Liceaga.

Cohen es fundador de Catus Film & Video. Se ha dedicado al reportaje, documentales, cortometrajes, videoclips para casas nacionales y extranjeras; Lorenzo Hagerman en 1991 estuvo como corresponsal en la guerra de la Ex -Yugoslavia. Lleva una carrera de veinte años como cinematógrafo documental, entre otros y ha laborado para Europa, Latinoamérica, EUA y para compañías del calibre de Discovery Chanel, la BBC y HBO; Alejandra Liceaga ha sido productora en línea y de campo por más de treinta años, obteniendo en 2010 el News and Documentary Emmy Award for Outstanding Informational Programming.

Si mencionamos la trayectoria o carrera de ellos tres, “grosso modo”, es porque el documental es todo lo esperado de tal y deja ver de manera realista la situación real en que vivimos en México con respecto al problema del agua al cual, en opinión de ellos mismos, no ha recibido la atención urgentemente necesaria y han logrado plasmarlo de la manera más imparcial pero la más realista y más cruda posible.

Nuevamente la realidad supera a la ficción. Estamos al punto de un colapso del sistema de irrigación y abastecimiento, así como de desazolve de agua en el DF y posiblemente en el país también, pues las repercusiones podrían verse en toda la nación si no actuamos en un marco de ocho a trece años, máximo.

¿Puede una ciudad con 22 millones de habitantes volver sostenible su relación con el agua? Hay alternativas que podemos seguir todos en conjunto, individualmente en nuestras casas y en las comunidades. El video nos muestra como grupos como “Las Islas” es pionero en proponer y solucionar el abastecimiento de agua a través del flujo pluvial. Pero hay muchísimo más que hacer si buscamos que el crecimiento de la población y la demanda de uso de agua o tratamiento de residuales no nos rebasen. Asimismo nos hablaron de que el activismo es de miles de personas o grupos con cientos de propuestas; mas es insuficiente: se requiere de nuestro aporte.

Durante la conferencia de prensa, misma que se inclinó en instantes al debate sin llegar a serlo, se mencionaron situaciones como el lamentable desinterés de parte de las autoridades, como el caso del actual Jefe de Gobierno, al cual se exhorta que vea el documental y sepa el riesgo que corre la ciudad (pero más lamentable es que la política sea una logística de intereses); vimos que entre otras posibles propuestas de documentales ésta es una oportunidad de hacer algo de provecho: fue imperativo el siguiente paso mientras se hacía la investigación, el siguiente paso dado con profundidad y el poder crear un buen impacto. Lo más difícil fue concentrarse en la “ruta del agua” sin extraviar el propósito principal del documental por las innumerables vetas y aristas que surgieron como posibilidades para ahondar en otros rubros aledaños.

La información vertida en el filme informativo es alarmante en el caso de los tóxicos descubiertos en las áreas en que se encontraban las aguas negras más contaminadas; incluso llegó a ser un problema de salud para quienes en el desarrollo del filme estuvieron visitando día tras día esos lugares, con problemas de dermatitis y conjuntivitis entre los menores. También es increíble y escalofriante la “naturalidad” con que se riegan con esas aguas negras, excedidas en coliformes fecales, las verduras provenientes de otros estados cercanos al DF para consumo de nosotros, los capitalinos. Entre algunos problemas que todo ello en conjunto desemboca están las malformaciones fetales, enfermedades renales, aumento en abortos, problemas respiratorios, oculares y dérmicos, causados por la ingesta o inhalación de metales pesados o sustancias tóxicas como plomo, mercurio, antimonio, etc.; cifras que están constatadas y avaladas por científicos profesionales de Outsite Laboratories de México.

La cinta, apoyada por HSBC como contribuyente principal para el registro de la misma a través de su Dirección de Sustentabilidad (la cual es muy activa, comentan José y Alejandra) cuenta también con el apoyo de NDMantarraya, quienes distribuyeron títulos como HELI de Amat Escalante y La Gran Belleza, ganadora del Oscar a Mejor Película Extranjera y se estará estrenando en algunos sitios como: Querétaro, Puebla, Guadalajara; Monterrey, Mérida, Morelia; Oaxaca y el DF, con al menos cuarenta copias para comenzar; luego se buscará introducirlo en las dependencias que mejor uso puedan hacer le documental y algunas universidades; también en sitios marginados donde el acceso a este tipo de cine es pobre o nulo y asimismo en escuelas mediante proyecciones en pantallas esféricas inflables o similares.

“El no actuar es un crimen”, sostiene José Cohen. El problema al que nos enfrentamos no ha sido nunca sencillo, y en tantos sexenios no se ha logrado manejar cabalmente: esto supera incluso a los avances científicos de los que podemos echar mano; pero estamos a tiempo de hacer algo como ciudadanos de una de las más pobladas ciudades del mundo. Todos deberíamos ver el filme. Esta vez debemos invertir algo de nuestro tiempo, dinero y esfuerzo en entender esta situación que está apunto de ocurrir en nuestra ciudad y nuestro país y a la cual las autoridades no están pudiendo atender del mejor modo. Se estrena en cines el próximo 28 de agosto del presente año. Veámosla y apoyemos su difusión.