Por: Aldo Grajeda./Fotografías: Luis Rod.

La noche del martes se presentó con éxito «Orlok: El Vampiro» de Jose Fors y se puso gótico el Teatro de la ciudad, aunque sea solo por una noche.

Y bueno al público parece que le gusto y tengo que serles sincero, la puesta tiene grandes aciertos pero también grandes deficiencias, ya que el aspecto musical así como la dirección vocal en casi su totalidad me pareció estupenda. La interpretación vocal de los personajes fue maravillosa, pero la dirección escénica es terrible así como el tránsito y los puentes entre escenas son de teatro escolar, porque aun no terminaba de salir un personaje del final de su escena cuando ya estaban entrando otros, y sino eran los tramoyeros estorbando atrozmente la escena además que no estaban hilvanadas armónicamente entre una y otra.

No puedo criticar el aspecto actoral, ya que a pesar de que había un estupendo trabajo físico del personaje, no había lenguaje corporal orgánico, quizás sea porque son mas cantantes que actores… bueno a veces es uno de los pecados de la opera.

La historia tiene sus fracturas, porque no es sencillo contar una historia que ha sido contada hasta el cansancio y volverla fresca, desgraciadamente se soluciona debido a que la mayoría conoce la historia y muchas cosas se dan por entendidas, así que un «buuuuu» para Eduardo Ruiz Saviñón.

Leobardo Quirarte lo hace bastante bien, aunque al pasar la obra, esta se debilita un poco, Iraida Noriega esta estupenda, Vera Concilión a mi gusto muy fría pero cumple, Ugo Rodriguez pasa un poco sin pena ni gloria, pero esos personajes grises te pueden arrastrar a las sombras, Santiago Cumplido canta maravillosamente aunque casi no le entendí, Sara Valenzuela se roba la escena al igual que Erika Noguez y Jose Fors hizo gala de su interpretación.

La puesta en escena saldrá a recorrer distintos estados del país. Y esperemos que logren pulir la puesta, ya que como dije también tiene grandes aciertos y vale la pena con todo y todo; y mas por ser una producción mexicana, aunque aún le falta para igualar a la ópera rock «Dracula de Cibrian-Mahler» (El musical argentino).

¡Aunque claro! ésta producción que menciono costo más de un millón de dólares. Yo aplaudo a la UDG, que no importa si contribuyó con un peso o con miles… ¡que bueno que inviertan en cultura! Por mi parte les deseo éxito y ojalá hubiese más inversión para estos proyectos, pero aclaro, ésta es mi opinión.