Por: Jatzyri Coahuilas.
La tarde moría y la noche llegaba para los amantes que querían contemplar la música, así es como muchos esperaban por horas la entrada al salón José Cuervo, el objetivo era solo uno, escuchar a la banda de “No te va Gustar”, y con ello la adrenalina crecía, todos esperaban a que las luces se apagaran y que comenzara el show.
Después de una hora de espera y ver que no pasaba nada, los jóvenes que esperaban a que saliera la banda a tocar sus éxitos como: ESE MALDITO MOMENTO, TAN LEJOS Y A LAS NUEVE, comenzaron a gritar abuchear y por ultimo a solo gritar en forma de porra “NO TE VA GUSTAR”. Por lo que después de media hora, el plazo se había cumplido, las luces se apagaron y el escenario cobro vida, la entrada de Emiliano Brancciari fue lo que todos esperaban.
Banderas de México, carteles con mensajes para los chicos de la agrupación, gritos y euforia fue lo que prendió a la banda, a lo lejos se escuchaban las canciones corear y sus nombres sonar, los chicos originarios de Uruguay pusieron su toque personal, pues el coqueteo con sus fans era espectacular, lo que hacía que se reflejara locura al por mayor.
Así fue como la noche cobro vida entre música, baile y alcohol, era la fiesta perfecta, y el momento ideal, no solo los unía la música, se juntaban la locura y el amor, y lo que parecía que “NO te va Gustar” resulto una espera inigualable y especial.